Vecinos y vecinas marcharon por las calles rosarinas el fin de semana con diversos reclamos, que van desde la violencia obstétrica hasta la falta de médicos.
Ya en el mes de octubre otra marcha tenía lugar en las calles de Rosario de la Frontera. El pedido era el mismo: mejoras en el sistema de salud. Pero en aquella oportunidad, vecinas y vecinos autoconvocados, confeccionaron una seria de demandas concretas.
Entre esas demandas, que se repitieron durante el fin de semana pasado, en otra de las marchas por la salud, tenemos: Atención humanizada; mejorar el trato y velar por el cumplimiento de los derechos de los pacientes; mayor control para que sea efectiva la presencia de médicos en las guardias; cese a la precarización laboral del personal en el nosocomio; y el cumplimiento pleno de la ley de parto respetado para no incurrir en violencia obstétrica.
Otro de los reclamos fundamentales, que también puede extenderse a muchos centros de salud de la provincia, fue la falta de insumos y profesionales. “Y si esto no cambia, vamos a seguir con las marchas hasta que las autoridades tomen cartas en el asunto y revean la situación del hospital, porque acá estamos peleando por la vida de las personas, y por un trato digno”, comentaron a El Tribuno.
Un dato curioso es que cuando la marcha llegó al hospital Melchora Figueroa de Cornejo, no encontraron a nadie de la gerencia para elevar sus reclamos. “Venimos a ver quién nos recibe porque queremos una respuesta sobre el petitorio que hemos dejado en la marcha anterior. Sabemos que la gerenta no iba a estar presente, según lo que ella dijo en un medio, y que iba a dejar un encargado, ya que ella tenía conocimiento de que nosotros íbamos a venir en marcha”, aseguró una de las marchantes, que luego detalló: “Lo único que conseguimos es hablar con un médico de guardia, y nos dijo que no había por el momento ningún encargado de firmar los códigos rojos. O sea que si en este momento hay una urgencia, encima que no hay anestesista, tampoco hay un encargado de ese enfermo”.
