El aumento estaba previsto para junio, pero lo postergaron para el mes próximo para acolchonar el impacto inflacionario. Las petroleras amenazan igual con subir los precios.
El Gobierno intentó poner paños fríos y amortiguar el impacto de la inflación en pleno año electoral. Es así que la Secretaría de Energía decidió postergar el Impuesto al Combustible Líquido (ILC) que estaba previsto para junio y que se haría efectivo finalmente en julio.
Sin embargo, las petroleras advirtieron que de igual forma ajustarían entre un 2% y un 3% el expendio de los hidrocarburos. Los argumentos son los mismos de siempre: que existe un atraso respecto al costo internacional (es decir, en dólares) de los combustibles.
Desde el sábado, entonces, los combustibles sufrirán un aumento por la vigencia del Impuesto al Dióxido de Carbono (IDC), cuyo impacto será de unos 63 centavos para el gasoil y 74 centavos a las naftas. Se estima que en Salta, por el precio diferencial a nivel país, el aumento sea aún mayor.
La nueva medida del gobierno será publicada en las próximas horas en el Boletín Oficial y así quedarían las reformas sobre el ajuste automático cada tres meses, según la variación de la inflación minorista que mide el INDEC. En Cada Rosada se ufanan de haber mermado un 1,5% el aumento previsto.
