Ahora la zona afectada es la calle Caseros, entre Vicente López y Juramento. El arreglo responde a un pedido que los concejales le transmitieron a la Secretaría de Obras Públicas.
Durante el fin de semana largo, y por segunda vez, tuvieron que levantar los adoquines por hundimiento en Caseros, entre Vicente López y Juramento. Según informó el diario El Tribuno, este arreglo responde a un pedido que los concejales le transmitieron a la Secretaría de Obras Públicas municipal, luego de realizar un recorrido y advertir distintas falencias, incluso del propio municipio.
Los trabajos comenzaron el día sábado y El Tribuno aprovechó para dialogar ayer con los trabajadores, quienes bajo el sol y contrarreloj colocaban la última parte de los adoquines. Ellos señalaron que la tarea consistió en «volver a quitar todo». Uno de los obreros explicó que la base que debía soportar el hormigón, la cual está hecha de ripio, estaba rota por filtraciones de agua, por lo que la capa de 15 centímetros de hormigón no soportó y cedió. Por ello explicó que quitaron esa parte y volvieron a armar las tres capas: la de ripio, hormigón y tierra, para colocar nuevamente los adoquines.
Según se supo, en la tarde de ayer quedó habilitado el sector mientras el secretario de Obras Públicas municipal, Wanny Caramella, aclaró que «se puso a media calzada para no tener problemas con el tránsito». Los comerciantes fueron los más afectados por la mala ejecución de la obra. «Esta calle es la segunda vez que la arreglan por hundimiento. La idea de embellecer la ciudad me parece muy buena, pero si se hubieran hecho las cosas bien…», comentó un comerciante que prefirió no dar su nombre.