El ex gobernador de Salta se conectó a la sesión del senado desde la madre patria. Quería votar en contra de lo que definió como el “proyecto de la venganza K”. Le explicaron que el reglamento lo impedía.
El senador nacional por Salta dijo que debió viajar a España por «motivos personales», pero pidió participar desde el exterior del debate por la reforma judicial para poder votar en contra de la iniciativa oficial.
Le explicaron que el reglamento sobre sesiones virtuales solo permite participar desde el domicilio o reparticiones públicas dentro del país. Tras tomar conocimiento del impedimento, Romero solicitó licencia por un mes, algo que se le otorgó.
Cabe recordar que el salteño fue uno de los que rechazó con más énfasis el proyecto que propone reordenar la Justicia Federal. En su cuenta de Twitter definió al proyecto como un “plan de venganza K” y celebró las marchas que en plena cuarentena se realizaron en contra de la iniciativa.
Es más, cuando todavía estaba en el país tuiteó lo siguiente: “Que estas marchas espontáneas y multitudinarias, en defensa de las instituciones y la Constitución, sirvan para la reflexión de aquellos que en silencio avalan políticas K, de corte totalitario y revanchista. Los peronistas republicanos sostenemos el diálogo y la unidad nacional”.
