El Peronismo Federal, el kirchnerismo y los renovadores impulsan una sesión especial para tratar proyectos indigeribles para Macri. La oposición llega al quórum y el oficialismo se prepara para bloquear el tratamiento de los proyectos.
La Casa Rosada está convencida de que la oposición tiene chances de reunir quórum para la sesión especial que pidió para mañana con una lista de más de 30 proyectos que incluye dos temas tóxicos para la gestión Macri: terminar con los tarifazos y eliminar impuestos a los jubilados.
La posibilidad del quórum es real. Según el poroteo que ejecutan los medios nacionales, con las bancadas del kirchnerismo que lidera Agustín Rossi, la del peronismo federal que preside Pablo Kosiner y la de los renovadores con Graciela Camaño a la cabeza, suman 114 legisladores. A ellos se sumarían otros 10 diputados de Red por Argentina, los ex massistas y evitistas que lidera Felipe Solá, 4 puntanos y 3 del Frente de Izquierda.
“Si no hay ausencias ya superarían los 130 legisladores. Hay dudas porque muchos están enfrascados con las elecciones en sus distritos. Pero lo que pase el jueves será también un termómetro de la pelea política nacional en el año electoral” enfatizó Clarín en su edición de hoy.
“Por eso, el oficialismo convocó a sus legisladores a Buenos Aires, a pesar del feriado del 2 de abril que partió la semana. La misión: esperar tras bambalinas y si la oposición consigue sentar en sus bancas a 129 diputados para abrir la sesión, entrar al recinto, y hacer valer su tercio holgado (108 diputados) para bloquear el tratamiento de los proyectos”, precisó el mismo medio que recordó lo siguiente: como ninguno de los proyectos tiene dictamen, necesitarían dos tercios de los votos para tratarlos sobre tablas.
