El periodista y analista Franco Hessling analizó la administración del conflicto por parte del gobierno y particularmente del ministro del área. “En el gobierno no tienen vocación política”, subrayó.
“Cuando Gustavo Sáenz era intendente tenía un funcionario con el cuero duro como Luis García Salado que ponía el pecho y se bancaba los problemas de la Municipalidad” recordó y advirtió que “ahora, como gobernador, no tiene ningún funcionario de esas características”.
Entrevistado en el programa “Cuarto Oscuro” de FM La Cuerda 104.5, el trabajador de prensa, docente universitario y analista razonó que “Cánepa no habló con nadie y no cambió su dogma de origen ‘solo se negocia con los gremios’ ni siquiera por estrategia y conveniencia y eso confirma su falta de cintura política, su apego al dogma, su desconexión con la realidad y que está mal asesorado” y observó que “ese es el gran dato de esta lucha docente: en el gobierno no tienen vocación política”.
Finalmente, Hessling consideró que “se puede gestionar de una manera mucho más llevadera, pero el gobierno no lo hace” y remarcó que “sorprende que el tridente Sáenz, Nicolás Demitropulos y Pablo Outes que son cuadros políticos no hagan política en una situación como esta, más allá de lo electoral”.
