jueves 28 de marzo de 2024
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«Hay que revisar una política que no solo pasa por lo deportivo, sino por lo social» | Nicolás Hirtz sobre las inferiores del fútbol salteño

El periodista de Salta12 realizó un informe a raíz de la prueba que realizó el club Boca Juniors en Salta. Entrenadores y especialistas en fútbol infantil coincidieron en que la problemática socioeconómica de la provincia genera una desigualdad en el acceso al deporte de primer nivel si se compara el caso de niños en otras regiones del país. Hay talento local, pero faltan recursos para potenciarlo.

Hirtz, entrevistado por el programa Cuarto Oscuro (FM La Cuerda 104.5) comentó «hablamos con el Puma Garnica, exjugador de Gimnasia y Tiro de Salta, que además jugó con muchos de los que terminaron ganando la copa del mundo en el 86. Él tiene contacto con gente de Boca Juniors y a través de eso pudo lograr que venga Diego Medina, que es el coordinador general de captaciones de Boca, a hacer una prueba con chicos de la categoría 2006 hasta 2011». En la convocatoria hubo más de 2500 chicos, en ese contexto «la gente de Boca decía que faltaban muchas cuestiones en el fútbol salteño relacionadas a la pobreza, a la falta de acompañamiento tanto económicas de la familia como de los clubes para preparar a los chicos para que lleguen a esa edad mejor formados, con otra contextura física y otra mentalidad en el juego, que es lo que notaron que hacía falta acá», acotó el entrevistado.

«Después, hablando con un par de técnicos más, como Pablo Moncholi que estuvo varios años dirigiendo las inferiores de la selección salteña y Central Norte, entonces conoce del tema y reconoció que sí, que la contextura de los chicos en el norte es distinta, pero que eso no debería influir. De hecho contaba que hubo casos en que los chicos de selecciones salteñas jugaron con otros de Mendoza, Mar del Plata o Santa Fe, que eran inmensos y les ganábamos. Pero también planteaba que sí, hay esa diferencia porque se da el caso de chicos que no comieron bien o no están yendo a la escuela y si a eso le sumás que en Salta las categorías no son suficientemente competitivas, no hay un incentivo, entonces se forma un combo en el que los chicos salteños que pueden llegar, a los 15 o 16 años, terminan en Santiago del Estero, Tucumán, Córdoba o Santa Fe. Las regiones que tienen equipos en primera o al menos en la B Nacional», relató.

Luego, el periodista de Salta12 amplió: «También hablamos con Sergio Plaza, que además de haber sido un jugador de futbol reconocido, estuvo en la Secretaría de Deportes. Y el planteaba que desde ese lugar veía chicos que llegaban y estaban muy flaquitos, pero que esta es una cuestión que hay que cambiarla con el tiempo y revisar una política que no solo pasa por lo deportivo, sino por lo social. Yo le preguntaba y cómo hicieron ellos que son toda una camada de jugadores salteños que llegaron; y él planteaba que en general tuvieron un equipo de Salta en la B Nacional, que peleó un ascenso y lo logró. Y que eso es ya una vidriera importante al lado de chicos que por ahí juegan igual de bien pero la vidriera es una Federal A. También señaló que ninguno de los que llegó venía de familias con problemas económicos; todos eran de clase media o de clase media alta. Entonces se mentalizaban en jugar, en entrenar, descansar, comer bien y podían hacerlo, no era una preocupación». Pese a todas estas condiciones adversas, según constató Hirtz en su artículo, todavía existen en Salta los «tocados por la varita que vienen los clubes de afuera y se los llevan cuando son chiquitos. Pero son uno por millón». «Sin embargo a»

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