El caso del adolescente asesinado por la policía porteña puso en foco nuevamente el pedido de mano dura, bala para los delincuentes y más posturas conservadoras.
La muerte de Lucas González, el adolescente de 17 años que fue asesinado por la policía porteña en un caso de gatillo fácil, reavivó la discusión de «mano dura» que surgió a partir del llamado Caso Chocobar, protagonizado por un salteño.
Luis Chocobar es salteño. Trabajaba en la policía bonaerense. El 8 de diciembre de 2017 mató por la espalda a un joven que había cometido un robo. Esto derivó en una discusión entre aquellos políticos que defendían los derechos humanos y los que pedían mano dura contra los delincuentes y defendieron el accionar de Chocobar. Entre estos últimos estaban Horacio Rodríguez Larreta, Patricia Bullrich y Mauricio Macri.
El caso de Lucas González reavivó la polémica dado que el adolescente fue asesinado por tres policías de civil que circulaban en un auto sin patente y que dispararon sin razón, una actitud que se entendió como una consecuencia del pedido de mano dura de algunos sectores.
Tras la muerte del joven, sus familiares denunciaron que los efectivos que dependen del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires «tiraron a matarlo» y que le «plantaron» un arma de fuego para simular un enfrentamiento.
