Tres comunidades originarias de Salta desarrollan un proyecto sostenible que produce goma de brea, un árbol que crece en el chaco salteño y cuya resina es idéntica a la goma arábiga, un producto de alta demanda industrial, además la planta tiene un alto potencial para fijar suelos y mejorar las condiciones del ambiente.
Tres emprendimientos indígenas de la provincia de Salta, Argentina, han sido reconocidos esta semana por el Fondo Mundial para el Medio Ambiente. Uno de ellos es la extracción de resina de brea, una unidad de negocio en funcionamiento en Coronel Juan Solá (Morillo) que se dedica a la recolección de la resina extraída de la corteza del árbol de brea, una especie que crece en el Chaco Salteño.
La resina extraída es similar a la goma arábiga, un insumo que se importa para su uso como espesante en la industria alimenticia y en el proceso de fabricación de vinos, entre otras utilidades. La iniciativa es desarrollada por tres comunidades originarias con el apoyo de la asociación civil TEPEYAC, y ha recibido financiamiento del Programa de Pequeñas Donaciones del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
La asociación TEPEYAC ha trabajado durante más de 30 años en colaboración con las comunidades indígenas para identificar alternativas de desarrollo sostenible que permitan utilizar los recursos naturales de estas comunidades en las tierras que les pertenecen. En este caso, la resina de brea se presenta como un camino innovador para el Chaco Salteño y para las comunidades indígenas, y se busca establecer una cadena de valor de la goma brea en beneficio de las comunidades wichí de Rivadavia Banda Norte, según explicó Silvia Molina, miembro de la asociación.
La resina de brea o goma brea es un sustituto de la goma arábiga, que tiene una demanda creciente en la Argentina y en el mundo para varias aplicaciones industriales, técnicas, medicinales y demás. Además, el árbol conocido coloquialmente como Brea tiene una propiedad importante como fijador de suelos, lo que la convierte en un recurso estratégico para la zona donde los desmontes avanzan a paso feroz.
El proyecto, comentó Eduardo Bertea a Radio Nacional, también tiene como objetivo mejorar los ingresos económicos de las comunidades indígenas y contribuir a la recuperación de áreas degradadas y desertificadas. En colaboración con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), se busca aprovechar y difundir esta propiedad de la resina de brea para fijar suelos y mejorar la absorción de carbono en la región, en un momento en que la función del suelo se vuelve cada vez más importante en el contexto del cambio climático.
