Mientras Matías Canepa no aparece por el ministerio de Educación, el área de Producción provincial parece carecer de plan productivo. En Catamarca, mientras tanto, anuncian 550 millones de dólares para producir litio de alta pureza.
Hay un denominador común entre Salta y Catamarca en lo que actividad litífera se refiere: la ingeniería jurídica se orienta a promover la atracción de inversiones privadas y asumieron sin complejos una posición que se corresponde con el carácter liberal del sistema normativo minero nacional. Así lo indica al menos un informe del investigador Martín Obaya titulado “Una mirada estratégica sobre el triángulo del litio”.
Pero mientas los liberales catamarqueños avanzan con decisión, los salteños quedan enredados en anuncios y palabras. El resultado es que la provincia vecina concreta inversiones que en Salta sólo se prometen. Ejemplo: los medios catamarqueños informan en el día de hoy que la Agencia de Crédito a la Exportación del Reino Unido (UK Export Finance), está dispuesta a respaldar hasta el 70% del financiamiento total requerido para el proyecto Kachi Lithium del desarrollador Lake Resources NL.
La inversión inicial sería de 550 millones de dólares, pero podría alcanzar un monto de hasta 800 millones de dólares. El financiamiento respaldará la expansión de la producción a 50,000 toneladas por año de carbonato de litio de alta pureza equivalente, en medio de la creciente demanda de litio para baterías. Así lo anunció ayer el gobernador catamarqueño Raúl Jalil junto a la ministra de Minería Fernanda Ávila y la noticia atraviesa a todos los medios de esa provincia. Kachi Litio está ubicada en el Salar Carachi Pampa, en Antofagasta de la Sierra. Actualmente se encuentra en etapa de exploración avanzada y de factibilidad.
