Primero dos concejales denunciaron al IPV por adjudicar la mayoría de los terrenos a capitalinos; ahora son blancos de las denuncias urbanizadores privados. MDay es la última de las señaladas.
El incremento demográfico y el consiguiente aumento en la demanda de viviendas está impactando fuertemente en la localidad de Cerrillos por una combinación de factores: su cercanía con la ciudad de Salta; mayores factibilidades para generar infraestructura básica para la construcción de viviendas; hábitos urbanos que deslizan a muchos a buscar un contacto más cercano con la naturaleza; y precios de mercados que, sin ser bajos, sí lo son en relación a otros espacios abiertos como San Lorenzo o Vaqueros.
Todo ello ya preocupa en demasía a autoridades y vecinos que sienten que el incremento en el valor de los terrenos atenta contra los cerrillanos y favorece de forma gigantesca a los desarrolladores urbanos que no siempre cumplimentan sus obligaciones al menos por dos razones: el avance de empresas que realizan loteos sin la habilitación municipal y los incumplimientos en que incurren las firmas que sí cuentan con esas autorizaciones.
Lo primero fue objeto de pedidos de investigación que según los cerrillanos nunca avanzan; mientras lo segundo alarma a las autoridades que suman y restan con los dedos para ver si podrán costear lo que en principio deben pagar los desarrolladores inmobiliarios. El ejemplo que ahora denuncian algunos ediles y funcionarios es el de la firma MDAY, una empresa importante que, como otras del rubro, suelen operar del siguiente modo: se asocian con dueños privados de grandes extensiones de terrenos quienes aportan la tierra mientras el desarrollador urbano consigue las autorizaciones para lotear y aporta el capital para proveer de infraestructura urbana a los mismos. Una vez garantizado ello, venden los lotes a un precio muy superior al original convirtiéndose en un pingue negocio para los socios originales.
En el caso de Cerrillos, algunos concejales se concentran en cinco proyectos de MDAY aunque la página web de la firma muestra que son muchos más. Los mencionados en estos casos son Mollar I, Cerros de Miraflores, Miraflores I y II y Los Adobes que según se denuncia evadieron obligaciones o están en camino de hacerlo. Una de esas obligaciones está contemplada en la Ordenanza 383/16 que establece que una vez finalizado el loteo, los desarrolladores deben donar las calles, veredas y ochavas del mismo al municipio que es quien garantizará el mantenimiento de los mismos, aunque para aceptar esa donación el loteo debe contar con el servicio de cordón cuneta.
Justamente allí, los denunciantes advierten que MDAY incumple el requisito y por ello el municipio estaría negándose a aceptar la donación de los loteos de al menos Miraflores I y Miraflores II. “En esos casos presentaron la donación sin esa obra y evidentemente no existe voluntad por parte de los loteadores de respetar la ordenanza 383/16, por lo que la municipalidad no quiere recibir la donación” aseguran a CUARTO quienes piden mantener el anonimato, pero precisando que ambos loteos suman un total de 33 hectáreas y 200 lotes, dato éste último que coincide con la información que la página web de la empresa difunde y en donde se aclara que se tratan de 98 y 100 lotes respectivamente.
A la hora de indagar cuánto dinero supone el incumplimiento, las respuestas indican que “ese tipo de obras costaría unos 17 millones de pesos. Es mucha plata para un municipio como Cerrillos; más teniendo en cuenta que se trata de una plata que debería desembolsar MDAY que ya vendió todos los terrenos” (dato este que también corrobora la web de la firma). Cuando CUARTO consulta si ese incumplimiento es producto de la crisis económica o de una práctica recurrente, los interrogados se muestran inclinados a lo segundo, aunque sin enfatizarlo del todo: “Tiene que ver más con lo primero. Pasó con la urbanización Cerro de Miraflores que es un emprendimiento ya terminado. Esa vez hicieron lo mismo, pero mediante una ordenanza de excepción que se aprobó durante la gestión de Corimayo pudo librarse”, recalcan recordando los tiempos en que el anterior jefe comunal reinaba en el municipio.
Finalmente, y al ser consultados sobre la situación de El Mollar I y Los Adobes, las fuentes aseguran no saber mucho de la primera y que en el caso de la segunda se trata de un proyecto en ejecución, con lo cual es difícil saber cómo terminara la historia.
