Ocurrió ayer en la localidad de Joaquín V. González. Madres y padres aseguran que Herberto Hernán Avilez hasta se dio el gusto de organizar una fiesta en su casa. Los manifestantes reclaman prisión efectiva al imputado hasta el juicio oral.
Avilez está imputado por abuso sexual en perjuicio de ocho niñas y mientras espera el juicio oral goza del beneficio de la prisión domiciliaria, a pesar de tener 52 años. Los manifestantes reclamaron que el docente cumpla prisión preventiva efectiva.. Argumentan que la vivienda se ubica a sólo 200 metros de la vivienda de una de las niñas denunciantes, aunque la gota que rebalsó el vaso ocurrió este fin de semana “cuando se hizo público que Avilez hizo una fiesta en su casa” destacó en su edición de hoy la sección local del diario Página 12.
Mientras la defensa de Avilez adujo que se trató de una reunión familiar, los vecinos viralizaron videos filmados sobre el “encuentro familiar” y el momento en que llegó la policía para suspender la reunión. Eso fue el detonante para la marcha y el escrache de ayer a la vivienda del imputad en cuyo frente le arrojaron pintura negra y se hicieron pintadas dando cuenta de las acusaciones que pesan contra él.
“Los manifestantes también marcharon hasta la sede de la fiscalía penal en González, donde se reunieron con la fiscala María Celeste García Pisacic. La abogada Sandra Domene, que representa a las querellas de las denunciantes, contó a Salta/12 que la fiscala le dijo a una madre que el docente no había cometido ningún delito al realizar la fiesta en la vivienda donde cumple la domiciliaria” destaco el medio citado para luego agregar que el “Ministerio Público Fiscal de Salta informó que quien debe actuar es el juez de Garantías interviniente, Héctor Guzmán”.
Avilez fue detenido en noviembre de 2021 después de que padres y madres de siete niñas denunciaran que las había sometido a tocamientos abusivos cuando eran sus alumnas en una escuela primaria de González. Posteriormente una mujer adulta, animada por estas denuncias, acusó formalmente al docente por abuso sexual cometido cuando daba clases en la entonces Escuela N° 715, ubicada en la localidad de San Antonio, del departamento Copo, en Santiago del Estero y ella tenía solo 12 años de edad.
